Cómo escoger el color de lechada para tus mosaicos

Escoger el color de la lechada es uno de los momentos más importantes y también uno de los que suelen costar más. Hay gente que prefiere planificar todos los colores en el momento del diseño, teniendo en cuenta el color de la lechada como un color más a la hora de escoger el diseño y el color de la cerámica u otros elementos a utilizar en el mosaico. Pero la verdad es que yo no funciono así. Es cierto que siempre hago un primer diseño con el ordenador y juego con los colores hasta que encuentro una combinación interesante que creo que puede funcionar, pero la lechada nunca está presente en este momento. En mi caso, hasta que no llega el momento de poner la lechada ni siquiera me acuerdo de ella! Durante todos estos años he aprendido, y esto es algo muy personal, que varía en función de cada persona, que aunque siempre trabajo con un primer esbozo de diseño, acabo siempre improvisando bastante. Supongo que no me gusta seguir las reglas. Ni siquiera las mías! Así que no merece la pena pensar en el color de la lechada que voy a utlizar desde el principio porque sé perfectamente que voy a cambiar de opinión mil veces durante el proceso creador. Un problema menos si dejo esa decisión para el final.

Una de las cosas que más me cuesta transmitir a la gente es cómo puede llegar a cambiar un mismo diseño solo con escoger uno u otro color de lechada. La foto de arriba es un ejemplo de ello. En este caso realicé cuatro posavasos utilizando el mismo diseño y con los mismos colores de cerámica. Lo único que los diferencia es el color de la lechada. A veces las diferencias son más sutiles y a veces bastante más notorias. En este caso no escogí el color blanco como opción porque sé que hubiera arruinado todo el diseño. Aunque pensándolo mejor, hubiera sido una buena idea para acabar de ejemplificar las consecuencias de escoger un color de lechada equivocado ... pero no tuve bastante valor! Arruinar a propósito un mosaico? Buff .... Así que os muestro cuatro ejemplos más sutiles pero que creo que ya ayudan bastante a entender algunos conceptos básicos.

• Lechada negra: aunque es una de las lechadas preferidas por muchas personas, en este caso es la que menos combina con el resto de colores del mosaico. Resalta todos los colores a excepción del azul oscuro. El negro y el azul oscuro són colores demasiado semejantes y hace que la lechada no se vea, estropeando el conjunto. Descartada!  
• Lechada azul: como hay otros tonos azules en la cerámica utilizada para este diseño podríamos pensar que utilizar el azul como lechada ayudaría a que quedara todo más 'conjuntado'. Falso. La lechada precisamante tiene que contrastar con el resto de colores para ayudar a que éstos se vean. Descartado también el color azul. 
• Ya solo nos queda el color gris y el marrón, dos tonos que podríamos llamar 'neutros'. Los colores neutros son siempre los que más utilizo cuando la paleta de colores de la cerámica es muy dispar (colores oscuros y claros, fríos y cálidos...). Ayudan a armonizar todos los colores pero siempre y cuando la lechada ayude a que el resto de colores se vean bien y no queden demasiado apagados o pasen desapercibidos. Cualquiera de las dos opciones (gris o marrón) hubiera funcionado. Los dos ayudan bastante a resaltar los colores de la cerámica utilizada.

Espero que os hayan ayudado estos ejemplos!